Replantear acciones para disminuir la obesidad infantil en Tlaxcala, México.
Por: Dr. Daniel Zárate García.
Hace aproximadamente casi un año se firmo en Tlaxcala un "El Acuerdo para la Protección
Alimentaria en el Estado", estrategia que
deriva a su vez de una acción nacional, principalmente enfocado a la diminución de la
obesidad, ya que somos el estado que cuenta con mas alto índice de prevalencia,
sin embargo las acciones que allí se
establecieron por cada dependencia (SEP,SALUD, DIF, etc.) no lograron una articulación mínima y mucho menos un sistema de control eficiente por
cada una de las acciones, lo que llevo a estrategias sin sentido y con poca efectividad. En esta ocasión delinearemos algunos elementos que deben
de ser considerados en futuras intervenciones para lograr una mayor efectividad.
¿Qué debemos de considerar al educar a la
población?
Las practicas educativas que se
encuentran presentes en la secretaria de salud fueron las mismas desde su
creación (paradigma conductistas), y solo hasta apenas hace 4 años han
comenzado a cambiar, el primer esbozo de este cambio fue la implementación de
“Talleres Comunitarios del Programa Oportunidades en el cual se intenta explorar el aprendizaje
participativo (Paradigma Cognitivo, constructivista) ,y refiero que se intenta,
ya que se le tiene poco cuidado en la aplicación de estas actividades, tanto en
tiempo, como en contenidos y a pesar que en corto tiempo demostraron su
efectividad para mantener a la gente atenta y activa, no lograron establecer un
posicionamiento en la aplicación de los conocimientos en la vida cotidiana; y
la pregunta surge ¿Qué hace falta para mejorar?, bien esta respuesta la podría
contestar con dos recomendaciones, conjuntar un
nuevo paradigma (ambiental) a los ya establecidos y la otra es incrementar
la creatividad en las intervenciones tratando de considerar las emociones de
los individuos a trabajar, estos son
algunos ejemplos:
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De manera casi accidental presencie
una demostración de una empresa de artefactos de cocina, donde su estrategia de venta consiste en
visitar a los hogares, demostrado los beneficios de sus productos, pero lo que me llamo la
atención fue que hacían la demostración
de la preparación del desayuno para la familia (con recomendaciones
nutricionales y de preparación de los alimentos), después a manera de convivio todos los
presentes degustamos dichos alimentos; Cabe resaltar que una de las
especificaciones al concertar este vista es que debe estar el jefe de familia,
ya que culturalmente es el que toma las decisiones entre ellas las alimentarias (regularmente es
el que manda a comprar el refresco).
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Platicando en alguna ocasión con un
colega que deseaba hacer un estudio de la eficacia de la supervisión de las
conductas alimentarias en hogares con niños desnutridos, debatíamos la
necesidad de que no solo la visita debería ser con la sola encomienda de
espantar a la madre, en que si no recupera a su hijo en determinado tiempo se
le quitaría el apoyo alimentario, situación que además de ser civilmente
irresponsable, caía en los terrenos del gastado paradigma conductista, lo que nos daría cambios
inmediatos pero no duraderos. Definitivamente nuestra solución era pensar en un
tipo demostraciones de preparación de alimentos, lo cual incrementaría
emocionalmente la autoestima de la madre
como preparadora de alimentos y el niño tendría opciones de alimentos y
de sazones.
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En los distintos talleres que realizo
en mi área laboral con madres con hijos menores de 5 años, tengo dos pregunta
clave para iniciar la sesión: De la escala de 0 al 10 ¿Cómo valoras tu sazón?,
la respuesta ha sido en promedio 7, y la según consiste en que describan el
sabor de su alimento preferido,
situación que nunca logra su objetivo, esto quiere decir que las madres, principalmente jóvenes, piensan que
no cuentan con un buen sazón, sin embargo el mexicano común casi nunca busca un
buen sazón, pues su paladar esta acostumbrado a tres estímulos, a lo salados, picoso y grasoso (los dos primeros
inculcados desde la época prehispánica y el ultimo inculcado con la llegada de
los españoles), pero surge un nuevo fenómeno social que ha afectado esto, que
consiste en la adición de bebidas azucarada (principalmente refresco), el cual
enmascara el deficiente sazón de las actuales y nuevas amas de casa, lo que no
necesariamente obliga a mejorar el sazón, pues el dulce esconde todos los
deficientes sabores, con que existan productos como refrescos o jugos en la mes
a la hora de comer es suficiente, pues llena y aporta energía a un individuo,
que erróneamente piensa que se esta nutriendo.
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Las personas encargadas de los establecimientos
de venta de comida en las escuelas, no cuenta con la capacitación básica del
manejo de los alimentos, ya que, con que se vendan productos baratos que gustes
y satisfagan los sabores preferidos (y
no los requerimientos nutricionales) de la mayoría de la población estudiantil,
se dan por bien servidos, siendo indiferentes a las consecuencias del consumo
de sus productos.
Como hemos visto en estos ejemplos, una mejor manera de
incorporar un sistema educativo en salud y desarrollo positivo de emociones
es la demostración en casa, que como
forma creativa tienen un sinfín de caminos por explorar, ya que tener un buen
sazón, por ejemplo, incrementara el consumo de alimentos como las verduras,
incrementa la autoestima de la ama de casa pues seguramente tendrá un
reforzamiento positivo y cada día se esmerara en que no decaiga su adecuado sabor, pero sobre todo en la mente de los
integrantes de la familia, ya no necesitara que se enmascare el sabor con lo
dulce del refresco pues se buscara explorar un nuevo sabor.
¿Que descabellado seria que se dieran clases de cocina
comandadas por la Secretaria de Salud?
¿Qué tan descabellado seria la existencia de un técnico en
preparación de alimentos en el equipo de salud?
¿Qué tan descabellado seria que toda cooperativa escolar debiera
contar con personal certificado por SALUD en la preparación de alimentos saludables?
Las anteriores preguntas necesariamente deben hacerse, por las
personas que quieran implementar intervenciones de salud más efectivas y busquen
alternativas laterales, ya que al no
contestarlas, solo permitiran que los evidentes estragos de obesidad, nos coman (literalmente) en el
camino.
